PULSACIONES
Supongamos que dos intérpretes de violín que se encuentran próximos entre sí, se proponen generar la misma nota musical. En otras palabras, desean que sus instrumentos suenen a la misma frecuencia. En la práctica, es posible que sus instrumentos emitan ondas de frecuencias ligeramente diferentes. Esta situación da lugar a un fenómeno de interferencia conocido como pulsaciones.
Consideremos dos ondas de sonido con frecuencias muy parecidas f1 y f2 que se superponen, al propagarse en la misma dirección, como se muestra en la figura. Al aplicar el principio de superposición, encontramos que se producen ondas cuya intensidad aumenta y disminuye en el tiempo con una frecuencia igual a f2-f1. Estos picos y depresiones representan las pulsaciones que son evidencia de las ligeras diferencias en las frecuencias de las dos ondas.
Una aplicación práctica de las pulsaciones es la afinación de instrumentos musicales. Por ejemplo, el proceso de afinación de las cuerdas de un piano se basa en la comparación del sonido emitido por cada una de éstas con el sonido emitido por un diapasón utilizado como patrón de cada nota. Cuando la frecuencia del sonido producido por la cuerda es ligeramente diferente de la del sonido del diapasón se producen pulsaciones. Variando la tensión de las cuerdas es posible ajustar las frecuencias emitidas por éstas, hasta que las pulsaciones desparecen y el instrumento se considera afinado.
PREGUNTA: Físicamente las pulsaciones pueden ser detectadas por el cambio de: