LENGUA CASTELLANA

LA ORACIÓN SIMPLE

La oración es la mínima unidad del habla con sentido completo. Con el fin de poder analizarla, se ha definido en función de dos componentes; el sintagma o frase nominal (FN) y el sintagma o frase verbal (FV), en donde la primera cumple la función de sujeto y la segunda la de predicado.

Ejemplo:

Camilo tomó la mano de Sara.

FN                  FV

La niña echó una mirada y siguió su camino.

FN            FV                           FV

LA ORACIÓN SIMPLE

Reciben este nombre aquellas oraciones conformadas por un solo verbo conjugado. Fernando lee un libro. Es posible que las oraciones simples tengan más de un verbo, sin embargo, esto suele suceder con una perífrasis del verbo, ya sea en su infinitivo, gerundio o participio. En estos casos, aunque el núcleo verbal de la oración es complejo, sigue siendo simple.

Perífrasis de infinitivo: Gerardo tiene que tomar conciencia.

Perífrasis de gerundio: Gustavo viene tomando las curvas muy cerradas.

Perífrasis del participio: Antonio lleva interpretadas varias canciones.

En este contexto, hay varios criterios de clasificación, entre los que se pueden distinguir. 

CLASIFICACIÓN DE LAS ORACIONES SEGÚN LA NATURALEZA DE SU PREDICADO:

Predicativas: son aquellas que tienen predicado verbal, es decir, que a través del predicado se le atribuye al sujeto un fenómeno o una acción.

- Patricia veía televisión en la sala.

Cualitativas: son aquellas que tienen un predicado nominal, es decir, que el predicado expresa una cualidad del sujeto.

- El leopardo es un animal salvaje.

SEGÚN LA ACTITUD DEL HABLANTE ANTE LA QUE EXPONE

La actitud del hablante se evidencia mediante la entonación, ya que esta permite añadir otro significado a las oraciones, o reforzar el original. En esta clasificación es posible encontrar:

Enunciativas o declarativas: conocidas también como declarativas o aseverativas, expresan la conformidad o disconformidad del sujeto con el predicado. Es decir, si poseen elementos de negación o afirmación. Para el primer caso (conformidad) tenemos por ejemplo: El carro es azul, Daniel come helado; por su parte la disconformidad se vería reflejada en las oraciones: El carro no es azul, Daniel no come helado.

Exhortativas o imperativas: expresan un consejo, ruego, mandato o prohibición. El hablante trata de influir en el oyente con el fin de lograr que este haga algo, por ello pertenecen a la comunicación interpersonal.

 - Sé más ordenado. (consejo)

- Por favor, dámelo. (ruego)

- No entre. (prohibición)- Venga. (orden/mandato )

Desiderativas u optativas: expresan un deseo, o una elección (por eso se llaman optativas). Aunque se utiliza la construcción del presente, pueden referirse al presente o al futuro. Es usual incluso encontrar la forma ojalá en este tipo de construcciones.

- Quiero visitar Alemania.

- Ojalá ganen el partido.

Exclamativas: expresan emociones directas, es decir, que el hablante demuestra sus sentimientos, ya sea de sorpresa, dolor, admiración, etc... con mayor fuerza. La entonación cumple un papel fundamental, pues es la que permite distinguirla del resto de oraciones. Siempre van escritas entre signos de admiración.

- ¡Feliz año!

- ¡Qué alegría volver a verte!

- ¡No te quedes ahí!

Interrogativas: se utilizan para pedir información. Aunque se pueden utilizar como imperativo, es decir, para dar una orden; de modo tal que gracias a la entonación que se imprima no lo parezca. No necesariamente van escritas entre signos de interrogación, puesto que pueden ser directas e indirectas. Las primeras preguntan directamente sobre algún elemento de la oración, o sobre toda la oración: ¿Quién es Nuria?, ¿Vino Mariano?

Las indirectas forman parte de una oración compuesta; son, por tanto, proposiciones, y dependen de un verbo de entendimiento (saber, suponer, averiguar...) o lengua (decir, preguntar, contar...):

- No sé qué has estado haciendo en la feria.

- Pregúntale a Juan Pablo quién es aquella chica.

- ¿Cuánto cuesta esa chaqueta?

- ¿Hace cuánto vives aquí?

- ¿Podrías cerrar la puerta? En este caso, aunque es una pregunta, se está dando una orden.

- ¿Te importaría acompañarme al aeropuerto?

Dubitativas: el hablante expresa duda e incertidumbre mediante adverbios de duda, tales como: acaso, quizás, tal vez, a lo mejor, posiblemente, etc. Hay diferentes formas de construir oraciones dubitativas. Se pueden expresar, por ejemplo, con adverbios de duda, a los que se pueden añadir los adverbios terminados en “-mente” para decir cosas como “probablemente sean las diez” o “seguramente sean las diez”, haciendo uso del futuro simple, como cuando nos preguntan la hora y decimos “serán más o menos las diez”. También se puede expresar este mismo enunciado haciendo uso de una perífrasis verbal modal, con lo cual responderíamos, a la misma pregunta del ejemplo, diciendo “deben ser las diez”. Tal vez venga más tarde. A lo mejor se equivocó. Quizás hoy llueve.

 

PREGUNTA: En el siguiente texto, tomado del cuento "El gigante egoísta" de Oscar Wilde , ¿A qué tipo de oración simple corresponden los fragmentos subrayados?

“-Pero, ¿dónde está el más pequeñito? -preguntó el Gigante-, ¿ese niño que subí al árbol del rincón?

El Gigante lo quería más que a los otros, porque el pequeño le había dado un beso.

-No lo sabemos -respondieron los niños-, se marchó solito.

-Díganle que vuelva mañana -dijo el Gigante.

Pero los niños contestaron que no sabían dónde vivía y que nunca lo habían visto antes. Y el Gigante se quedó muy triste.

Todas las tardes al salir de la escuela los niños iban a jugar con el Gigante. Pero al más chiquito, a ese que el Gigante más quería, no lo volvieron a ver nunca más. El Gigante era muy bueno con todos los niños pero echaba de menos a su primer amiguito y muy a menudo se acordaba de él.

-¡Cómo me gustaría volverlo a ver! -repetía.