AGRICULTURA Y GANADERÍA
La agricultura europea es muy compleja, como corresponde a un continente de antigua civilización, con múltiples influencias culturales, que se desarrolla sobre un espacio diverso y fragmentado. Si el clima y el relieve aportan las claves de la especialización productiva regional, éstas no se comprenden sin el curso de la historia, que ha ido materializando unos espacios agrarios diversificados a escala continental, regional y comarcal. Pero estos paisajes agrarios están cargados de múltiples factores disfuncionales como su excesiva fragmentación, con unas explotaciones demasiado pequeñas y divididas; fenómeno potenciado por la excesiva población agraria.
LOS CAMBIOS MÁS RECIENTES DEL MUNDO RURAL EUROPEO
Desde los comienzos de la industrialización del siglo XIX y, especialmente, a partir de la segunda guerra mundial, el campo europeo ha experimentado una auténtica metamorfosis agraria, fundamentada en el éxodo rural, la mecanización y tecnificación, la concentración parcelaria, al aumento del tamaño de las explotaciones, la modernización y especialización productivas, etcétera, factores que, en conjunto, han provocado el definitivo abandono de la economía agraria tradicional y la integración plena de una economía capitalista.
Las profundas modificaciones obedecen, por lo tanto, al proceso de adaptación de la economía tradicional a la moderna, proceso que ha desencadenado un enorme éxodo rural en todo el campo europeo, y en especial en Europa occidental y, sobre todo, mediterránea. Este hecho ha contribuido a hacer más grandes las explotaciones, aunque a veces no se haya debido más que a la desaparición de las más pequeñas.
Este retroceso de efectivos agrarios ha desencadenado en las regiones más afectadas la crisis de numerosos antiguos centros de servicios que, al ver mermada su demanda, junto a la gran competencia de los grandes centros urbanos, han visto sin poder hacer nada como se producía un éxodo de trabajadores no agrarios, lo que ha favorecido la ruralización de los pueblos más pequeños.
El éxodo rural, al actuar selectivamente, afectando, sobre todo, a la población joven, ha provocado un proceso de envejecimiento generalizado, aunque mucho más fuerte en la población agraria, lo que ha provocado que muchas explotaciones estén gestionadas por agricultores mayores de 55 años. Todo este proceso se acusa más en las regiones más agrarias, produciéndose una relación directamente proporcional entre el grado de envejecimiento de la población agraria de una región y su peso agrario, e inversamente proporcional con el nivel de desarrollo.
El éxodo rural, motivado por una demanda de trabajadores en la industria y los servicios, ha provocado, a su vez, la mecanización y tecnificación, en un proceso causativo y circular, que ha arrastrado a nuevos contingentes agrarios fuera del campo. Igualmente, el consumo de fertilizantes creció considerablemente, alcanzando hoy unos valores más o menos constantes en todos los países europeos.
PREGUNTA: Las profundas modificaciones en el sector agrario europeo, obedecen al proceso de adaptación de la economía tradicional a la moderna, proceso que ha desencadenado: